Barcelona traslada a ONU Turisme su intención de limitar el crecimiento de visitantes y regular la oferta
18 de junio de 2024
- El alcalde Jaume Collboni se ha reunido con el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, y el secretario general de ONU Turismo, Zurab Pololikashvili, en el marco de la 121a reunión del Consejo Ejecutivo del organismo que se ha celebrado en Barcelona.
- "La decisión de Nueva York de prohibir el alquiler de apartamentos para fines turísticos es una decisión valiente" ha expresado Collboni en su conferencia inaugural.
El alcalde de Barcelona, Jaume Collboni, ha trasladado a ONU Turisme la apuesta que ha hecho la ciudad para instaurar políticas públicas que limiten el crecimiento del número de visitantes así como regular la oferta vinculada al turismo. En una reunión previa a la 121ª reunión del Consejo Ejecutivo de este organismo internacional, que este lunes y martes se ha celebrado en Barcelona, el alcalde Collboni ha compartido estas reflexiones con el ministro de Industria y Turismo del Gobierno de España, Jordi Hereu, y con el secretario general de ONU Turismo, Zurab Pololikashvili.
Posteriormente, durante su discurso inaugural, Collboni ha reconocido y recordado la importancia del turismo en Barcelona por haber contribuido de forma decisiva a la prosperidad y el progreso económico de la ciudad y también para que Barcelona sea reconocida en todo el mundo, aunque alcalde también ha alertado de la necesidad de actuar para que el turismo siga siendo una historia de éxito. "El crecimiento turístico no puede ser infinito por la simple razón de que el mundo que compartimos tampoco es infinito", ha evidenciado, recordando que según las cifras de ONU Turismo este año el mundo alcanzará los 1.500 millones de turistas, unas cifras por encima de las registradas antes de la irrupción de la pandemia.
"Es el momento de abrir una nueva etapa, un nuevo paradigma turístico: después de décadas de promoción, ahora debemos centrar todos nuestros esfuerzos en su gestión", ha expresado Collboni, haciendo un llamamiento a defender los derechos básicos de vecinos y vecinas y también a preguntarse y debatir con el sector cuál es el volumen turístico que se puede asumir sin que esto afecte al acceso a la vivienda, la convivencia en los barrios o bien la construcción de un modelo urbano sostenible, social y respetuoso con el medio ambiente.
El alcalde ha detallado que el Ayuntamiento de Barcelona contempla cuatro herramientas básicas para evitar las consecuencias negativas de la masificación turística: actuar sobre la oferta, actuar sobre la llegada de los turistas a la ciudad, regular las zonas con mayor afluencia y la fiscalidad, cuatro capítulos dentro de los cuales el consistorio está trabajando para definir políticas públicas concretas, como demuestra la reciente creación de 16 Espais de Gran Afluència (EGA) y la priorización de los tres que hay en los alrededores de la Sagrada Família, el Park Güell y La Gardunya – Boquería.
Collboni ha subrayado especialmente un sector sobre el que actuar: las viviendas turísticas. Sobre este punto ha recordado que en las 25 principales ciudades del Estado su número ha aumentado un 25% en el último año: “No podemos permitirlo. Debemos actuar sobre la oferta”, ha defendido, recordando que este compromiso de Barcelona es compartido con Amsterdam, París y Nueva York. "La decisión de Nueva York de prohibir el alquiler de apartamentos para fines turísticos es una decisión valiente" que el resto de ciudades debe estudiar, ha precisado.
"En Barcelona estamos demostrando que es posible un turismo corresponsable con los retos de la ciudad", ha querido destacar igualmente el alcalde, recordando el Plan Clima Escuela para climatizar con energía verde y gracias a los ingresos del impuesto turístico las escuelas públicas de la ciudad. "Debemos apostar por un turismo con retorno social a las ciudades que lo acoge", ha añadido, y así hacer posible que la actividad turística continúe aportando prosperidad.